Muchas son las formas de energía, tantas como lo que podemos ver, oír, sentir,…, y muchas más. Cada átomo contiene energía, los nuestros también, luego somos energía.
Nuestro cuerpo desprende calor y tiene un campo electromagnético que se puede medir. No voy a entrar en discusiones para diferenciar materia de energía. Desde mi punto de vista, y no soy el único, la materia es una expresión de la energía, una forma de energía.
Lo importante de la energía es el uso que haces de ella. La energía radiactiva, se puede utilizar para hacer radiografías o para hacer bombas. Es por este motivo que no le voy a poner calificativos, sino que voy a hacer una llamada al uso responsable de la energía. Si las personas somos energía, tiene poco sentido decir que somos buenas o malas, tiene sentido ver si lo que hacemos con nuestra energía ayuda o daña y cómo utilizamos otras energías. Ver los fines y resultados de su uso, si contribuyen a la vida o la destruyen.
El planeta, con su atmósfera, es una enorme fuente de energía, así como el sol. Una energía que aporta vida a muchas otras, incluida la vida humana. ¿Estamos cuidando esa energía para la vida o estamos destruyendo lo que permite nuestra vida? ¿Nos responsabilizamos y pedimos a quienes nos representan que lo hagan, aunque pueda suponer algún cambio? O ¿Nos da igual la supervivencia de tantas formas de vida y energía, incluida la nuestra? Dejo estas preguntas para la reflexión. Sé que encontraréis las respuestas.
Podemos hablar de energía y sanación, también, aunque sea un giro brusco. Estamos viendo que es algo necesario, incluso los más ortodoxos aceptan la radiación como tratamiento de enfermedades graves, utilizando una forma de energía en la recuperación de la salud. Si la energía puede contribuir a la sanación, si las personas somos energía, entonces está claro: el Reiki y otras formas de trabajo energético pueden contribuir a la sanación. Además de los procedimientos ortodoxos de la medicina, la transmisión de energía (Reiki,…) debería formar parte de los procesos de recuperación de la salud, por su bajo coste, reducción de efectos secundarios, ninguna interacción,…
Otro día hablaré de la energía y su potencial creador, de la energía con la que modelamos nuestras vidas.
Abrazos sanadores.
Gracias por contribuir con tu energía, compartiendo tu experiencia a través de los comentarios. Pica debajo.
¡Hola!.Hace poco tiempo leí un libro que se llamaba "La Novena Revelación".hablaba que las personas que viven conectadas a si mismas pueden autobastecerse de energia sin necesidad de recibirla de otro,sino tomando conciencía de la fuente de la vida,residente en nuestro interior como algo innato.Si tuvieramos un nivel de percepción más elevado,podriamos sentir los campos energéticos que nos une con todo.En una de las revelaciones, el libro expone la tendencia humana a robar energia a otros seres humanos, un delito que cometemos inconscientemente,lo único que sabemos es que vamos buscando la atención del otro,y asi nos sentimos mejor.
ResponderEliminarSabemos que nuestro mundo está mal,pero creo que miramos a otra parte.
Mientras encontramos esa fuente que todos tenemos está bien ayudarnos con Reiki y otros trabajos energéticos para no robarla a los demás.
Abrazos llenos de buena energia.
Hola de nuevo M.J!
ResponderEliminarGracias por tus aportaciones. Un libro interesante. Creo que no es cuestión de robos, sino de necesidad de alimentar nuestra visión con la atención de otras personas y, si no somos conscientes, la dirigiremos a satisfacer nuestro ego, en lugar de crear alimento para el alma. La energía está en constante movimiento, y se dirije donde se dirije nuestra atención. Prestemos atención a las necesidades de la vida, esté donde esté, para sertir la satisfacción de lo que creamos juntos. Reiki y otras ayudas son bienvenidas.
Abrazos de Energía Universal.