Sinceramente, ¿te has preguntado cómo estás? Prueba a hacerte esta pregunta en todos los planos: físico, mental, emocional, social, familiar, laboral,…, incluido el espiritual. No te asustes si algo no está bien, podías vivir antes de hacerte la pregunta y seguirás haciéndolo después. En cualquier caso, no estaría de más dedicar algún tiempo a cambiar lo que no te gusta.
Estamos viviendo un gran cambio planetario, a nivel social y medioambiental, que afecta a todos los seres, incluidas las personas. Si entendemos que formamos una unidad, como describen muchas culturas, lo que sucede fuera es un reflejo de lo que sucede dentro y al contrario. Nuestro malestar interno, en forma de miedos, ira, afán de poder, ambición desmedida y un largo etcétera, han contribuido a crear la situación planetaria actual, y siguen alimentándola. Ver y vivir lo que está sucediendo, evoca en nuestro interior miedos, inseguridad,… En definitiva, estamos en un círculo vicioso del que no sabemos salir. Quizá debamos romperlo dejando de alimentarlo. Si reducimos nuestro malestar interno, tal vez, dejaremos de contribuir al deterioro de la vida en la Tierra; en cualquier caso, mejoraremos la calidad y, seguramente, la cantidad de nuestra vida.
Las terapias antiguas han sostenido la vida humana durante milenios desde una concepción holística, integrando a la persona en el lugar y en el momento presente, para que pudiese sanar. Sólo aquí y ahora podemos trabajar con los pensamientos, emociones y sentimientos, alimentos y “circunstancias” que nos enferman. En la medida que reducimos o eliminamos las causas de la enfermedad, la sanación se produce, la vida ocupa su lugar. Aquí es donde complementan la medicina convencional y, ya que deben perseguir los mismos objetivos, pueden mejorarla.
Es importante mirar qué me está pasando, para poder comprender y, si no me gusta, modificar la vivencia. Algo tan sencillo, puede resolver situaciones complejas de la mejor forma posible.
Todo lo que he expuesto es obvio, pero no deja de merecer otra reflexión.
Toneladas de abrazos sanadores.
Lo primero, gracias por tu voluntad, con este blog, de acercar tus prácticas y tu experiencia a mucha más gente.
ResponderEliminarLo segundo, darte la razón. Es cierto que todo en este mundo es uno. Todo está relacionado. No sé si somos capaces de cambiar lo que está pasando en el planeta; no sé si mis ojos lo verán, pero si creo que podemos intentar cambiarnos a nosotros y tener una perspectiva que haga todo más amable, quizá en ese sentido sí, tendríamos ese poder.
Pero bueno. No es fácil. Tú lo tienes muy claro, y te admiro y respeto por eso y por querer ayudar a los que no (como yo).
Cree que intento cambiar, vencer miedos, buscar bien aquello que debo hacer, pero no me es fácil. Hay cosas irreversibles, otras inabarcables y otras complejísimas.
Y sé lo que dirás, que paso a paso, sin prisa pero sin pausa (¡si es que de teoría voy para Cum Laude!), pero resulta desesperante y frustrante.
En fin, la cuestión es no bajar los brazos...
En ello estoy....pero con unas agujetas de tenerlos parriba!!!!
Saludos y sonrisas,
R
Gracias Menuda! Gracias por ver mucho más allá de lo que está escrito, por reflexionar y llevarlo a tu vivir.
ResponderEliminarNo hay fórmulas. El aprendizaje, como la vida, es un momento tras otro y, al igual que las olas, hay movimientos de avance y retoceso, mientras el mar permanece.
Un gran abrazo en el compartir
¡Bienvenido! al universo infinito de las nuevas tecnologias. Un espacio que siendo en ocasiones tan censurado y enjuiciado por todos en estos tiempos de prisas y desasosiegos nos permite estar más cerca los unos de los otros dándonos la posibilidad también de cultivarnos con las reflexiones que nos propones en tu blog.
ResponderEliminarGracias de verdad por toda esa experiencia puesta a nuestro servicio y de la que estoy segura sacaremos un gran provecho mútuo.
Respecto a la pregunta ¿Cómo estás? Es una cuestión que estoy segura nos formulamos en algún momento pero resulta que hay demasiadas cosas que no nos gustan y que deseamos cambiar y no somos capaces para seguidamente mirar hacia otro lugar y seguir huyendo de nosotros mismos un día más.
Seguimos nuestras rutinas diarias culpando al sistema o a quien se nos ocurra de nuestra impotencia dejando así de escuchar a nuestra salud, esa gran desconocida, que nos envia en forma de “achaques” avisos de forma incansable sobre el desgaste al que sometemos cuerpo y mente…
Y sí, estoy de acuerdo contigo, algo está cambiando, el planeta está cambiando y volveremos a otros patrones que ya nos dejaron nuestros ancestros que nos permitirán observarnos, sanar y fundirnos en la Unidad, eso sí guiados por Maestros de tu categoría.
Suerte a todos y Feliz día, pues.
Hola EgoWhisper!
ResponderEliminarGracias por tu calurosa bienvenida al mundo cibernético, en el que estoy aprendiendo a nadar.
Gracias por esa disposición para la escucha.
Cierto. Los hábitos se resisten, sólo porque no saben que estás dispuesta a dedicar atención y conciencia a modificarlos. Todos podemos cambiar. A veces es fácil, otras cuesta un poco más, pero siempre es posible. Deseo que nunca más tengas que pagar con facturas de salud, como me dices, por "mirar hacia otro lugar".
Todo cambia constantemente. Ya nos enseñaron que "lo único permanente, es el cambio". Lo importante es entender los cambios. Gracias, una vez más. Todos somos maestros y alumnos, a la vez. Seguiremos aprendiendo juntos.
Un cálido abrazo.
Primero darte las gracías por tu positivismo y buena energia.Y te agracezco que me hayas ayudado a luchar en mi desesperanza,en mi negatividad.Creo que todo es posible en la vida teniendo una actitud correcta.Gracías porque tú sin saber me has enseñado a preguntarme que hice mal?,ya tengo la respuesta,mi error ha sido de percepción, si se sabe razonar siempre se saca algo positivo.Espero seguir aprendiendo,¡se puede cambiar!,yo soy un ejemplo
ResponderEliminarSobre la pregunta ¿cómo estás?,como tú dices trabajando con las emociones y dando gracías a está médicina alternativa que me ha hecho tanto bien.Espero seguir creciendo,aunque pasito a pasito,pero creo que por buen camino gracías a personas como tú
Gracias por tu reconocimiento, persona anónima! Respeto tu intimidad y te doy la enhorabuena por tus avances, por tu proceso de cambio, por tu valor para cambiar y seguir adelante. Tú lo dices, eres un ejemplo. Ánimo! Me estimula haber servido de ayuda. Si me necesitas de nuevo, me encontrarás. En cualquier caso, cuentas con la ayuda del Universo en sus formas más sorprendentes. Un gran abrazo
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